"Los sectores A y B están saturados, es momento de que las empresas inmobiliarias miren a los sectores más emergentes, los microempresarios y familias jóvenes, pero con precios acorde a sus posibilidades", sostiene Yanina Cáceres, directora de Negocios de la Agencia de Riesgos Sentinel.
Señaló que para llegar a los sectores emergentes las inmobiliarias deben ofrecer viviendas que no sobrepasen los US$ 30 mil (aproximadamente S/. 90 mil), cifra que se aleja de los US$ 100 mil que actualmente cuesta, en promedio, un departamento de 70 metros cuadrados en Lima.
Consideró que para lograr estos costos reducidos se necesitan grandes proyectos y por eso las inmobiliarias deberán buscar terrenos amplios donde edificarlos.
Giovana Arellano, gerente general de la constructora Progestión, estima que en estos sectores de la población hay una demanda insatisfecha de unas 800 mil viviendas, por lo que las empresas inmobiliarias están evaluando reducir sus costos para llegar a los segmento C y D con precios más accesibles.
Indicó que en este 2015 Progestión estima vender 1.200 viviendas a estos sectores a precios un poco más reducidos, por lo que viene trabajando con el Fondo Mivivienda y el programa Techo propio.
Explicó que las inmobiliarias deben optimizar sus procesos, de modo que su rentabilidad no se vea perjudicada al abaratar sus ventas, pues actualmente una vivienda para el sector C está alrededor de S/. 290 mil.
Buenos pagadores
Arellano agregó que las personas de estos estratos que acceden a créditos hipotecarios son siempre buenos pagadores, pues la consideran como su única vivienda.
En tanto, Yanina Cáceres dijo que las personas de los sectores A y B son quienes más acceso tienen a los créditos hipotecarios, ya que para los bancos es difícil conocer a los clientes de los estratos menores, pues la mayoría no tiene importantes historiales crediticios en estas entidades, sino que son clientes de las cajas municipales y rurales.
"El 84% de créditos hipotecarios que se otorgan lo hacen los bancos, y las cajas tan solo representan el 9%, por eso es más fácil que las personas de los sectores A y B accedan a los créditos. Estas brechas se han ido reduciendo, pero aún son muy grandes", señaló Cáceres, quien espera que este proceso de reducción de costos no sea tan lento como aparenta, pues de esto depende en gran parte el dinamismo del sector.
"El año pasado el sector construcción cayó, y si de verdad quieren que este año haya un repunte significativo deben apuntar a las personas de los sectores C y D, allí está la clave", sostuvo.
Por su parte, Pilar Cano, jefe de Ventas de la constructora La Venturosa, reconoció que son las personas del sector C las que están originando el mayor movimiento en créditos hipotecarios, por lo que su inmobiliaria tiene en cartera cinco proyectos para la población de los sectores B y C ubicados en Surco, La Victoria y otros distritos.
Sobre los precios, Cano dijo que están haciendo todo lo posible por mantenerlos estables, ya que por el momento una considerable reducción no es posible; sin embargo, manifestó que las entidades bancarias han endurecido sus políticas para el otorgamiento de créditos hipotecarios, lo cual reduce el nivel de compra.
Actualmente en los conos de Lima hay más proyectos dirigidos a los sectores emergentes y con precios más cómodos que los que hasta ahora se han venido comercializando.
Según el Fondo Mivivienda, en el cono norte –en los distritos de Comas, Puente Piedra y Carabayllo– se pueden encontrar a la venta departamentos de 70 metros cuadrados entre US$ 56 mil y US$ 60 mil, precios que también se encuentran en el Callao.
¿Y quiénes son las personas de los sectores C y D?
El estudio Pirámide Socioeconómica de Lima Metropolitana sostiene que en la capital hay 794 mil familias que pertenecen al sector socioeconómico C y 712 mil al D.
Según explica el economista Jorge Gonzales Izquierdo, las personas de estos sectores son las que viven en las periferias de la ciudad (conos o barrios clasemedieros).
Dijo que los del sector C tienen un ingreso que varía entre S/. 1.000 y S/. 2.000 al mes y su nivel de estudio es técnico o, en los mejores casos, universitario.
En tanto, los del segmento D tienen ingresos que oscilan entre S/. 750 y S/. 1.000; su grado de instrucción es secundaria completa y se dedican a algún tipo de comercio o subempleo.
http://www.larepublica.pe/01-02-2015/inmobiliarias-buscan-bajar-precios-de-casas-para-sectores-c-y-d